En estos comentarios sobre el primer y último capítulo de "El Profeta" de Khalil Gibran, la contribución de Osho es mucho más que simplemente la perspectiva de otro poeta, porque Osho no es simplemente un poeta, no es simplemente un místico, alguien que ha experimentado la realidad de los sueños de los poetas, él es un Maestro iluminado. Como tal ha perfeccionado el arte de la comunicación a tal nivel que es en realidad lo más cercano posible a la verdadera comunión y donde el poeta nos da vistazos de otra dimensión muy alejada de lo que llamamos la realidad de todos los días, el místico trae esa dimensión directamente hasta nuestros propios pies. El no dice: "Esta es otra realidad acerca de la cual podemos soñar juntos" sino "Tú no has explorado la realidad de "aquí-ahora" de la cual estás rodeado: esa "otra" realidad está dentro de tí".