Este ensayo contiene una investigación psicoanalítica que abarca un campo muy poco frecuentado por los especialistas en esta disciplina. Los autores tratan de decubrir las raíces psicológicas del fanatismo desarrollando correlativamente una teoría novedosa del jugar, una revisión del vínculo temprano entre madre e hijo, conocido como Reverie, y una extensa indagación de las últimas adquisiciones teóricas sobre autismo, hasta llegar a su conceptualización como antecedente obligado del uso fanático. El aislamiento y el deterioro son dos notas principales de esta profunda perturbación del pensamiento y la conducta. Aquí se diferencian puntual y agudamente las transformaciones psicóticas de los desvastados, pobres y deletéreos productos fanáticos. Diálogos y unas extensas notas biográficas no convencionales acompañan a estas reflexiones. Los autores señalan, marcan y a veces indican cómo intentar proteger la mente del fanatismo. Desarrollan conceptos sobre los posibles antídotos individuales y grupales de la contaminación fanática. Las dificultades de esta tarea suelen ser de magnitud enorme, porque no solamente es una presencia mala sino un vínculo sustractor que representa el vacío; un vacío rellenado con infinitas cantidades de nada.